martes, 1 de junio de 2010

La Máquina del Tiempo

El cuento breve, tiene la virtud de hacernos viajar con la imaginación, nos puede regalar alegría como también tristeza, nos permite reflexionar, un cuento tiene una vida propia, es un pasaje hacia lo desconocido. Hoy les presento al autor Jonathan Pacheco, él con mucha ilusión escribió su primer cuento, donde su mejor ingrediente es el humor y lo desconocido. - Silvia Lepe Catalán. Profesora del Taller de Literatura.


Cuento : "La Máquina del Tiempo"

Recuerdo que era el año 2050, cuando un hombre vestido de plateado, como se usaba en aquella época, inventó una máquina del tiempo y viajó al año 2200, vio un mundo diferente, quizás un mundo al que uno nunca iría.


El hombre impactado, exclamó – ¡Oh! ¡Qué bonito es este mundo!-, pero qué extraño es.
De pronto, frente a él ve un hombre de piel dura y brillosa, entre verde y azul, con unos pies largos y delgados, de cara aplanada, con dos antenas sobre su cabeza, el hombre vio una nave cerca del extraño ser, dentro se apreciaban unos artefactos muy raros. El hombre preguntó -¿qué son esas cosas? El ser extraño contesta - son mis cosas y son muy poderosas, por ello no debes mirarlas, mucho menos aún tocarlas, yo tengo poderes en mis manos y con un dedo puedo alcanzar todo lo que desee, incluso, duplicar o destruir lo que se me antoje.


El hombre asustado murmuró -Qué bien por ti, pero debo retirarme, en mi época ya es hora de la teleserie.-
El ser verde contestó -No temas, quiero ser tu amigo, te invito a mi nave a cenar-
El hombre responde muy aliviado - Qué bien y ¿qué cenaremos?
-lo de siempre-contesta el ser extraño - puré de piedras hidrogenadas con polvo solar-
El hombre nervioso pregunta- ¿y si nos da sed?
El extraterrestre responde- Agua de cubanito-
-¿Qué es eso?- pregunta el hombre
-Nuestra agua azulada extra light - contesta el ser verdoso.
-¿Y si nos da sueño? - Pregunta el hombre.
-Si nos da sueño dormiremos diez mil años como acostumbramos en nuestro planeta.-contesta el marcianito.
El hombre pálido añade: buenas noches - tragando un sorbo de saliva que parecía haberse quedado atorada en su garganta.
El extraño ser sonríe destellando una luz violeta sobre su cabeza y le dice al hombre:-
-No, acá jamás se dice buenas noches, eso es para nosotros no despertar jamás, así que Mau Mau y a cenar.
El hombre sólo bebería agua de cubanito, aunque por hoy ya de seguro no habría teleserie.

F I N

Autor: Jonathan Pacheco
Curso: 5º Básico.

4 comentarios:

  1. no me gusto mucho este cuento aunque admito que estuvo bueno

    ResponderEliminar
  2. Me pareció divertido tu cuento ,me entretuve mucho.

    ResponderEliminar
  3. Que bueno saber que hay niños que pueden escribir de esta forma...el cuento me entretuvo, lo felicito.

    Yerko Guajardo

    ResponderEliminar